Para empezar a emprender, es complicado y requiere de esfuerzo y dedicación, la mayoría de personas pensamos que sacar algo nuevo al mercado es sólo eso, tener un par de ideas en la mente y presentarlas, ¡tarea acabada!, sin embargo para ello necesitamos seguir varios procesos y medirnos en las emociones para lograr un producto o servicio de calidad y calificado de manera objetiva. Debemos entender los procesos desde la creación de la idea hasta la aceptación del mercado, que es la parte más complicada de un emprendimiento, pero de ello depende nuestro éxito, no debemos dejar a un lado las sustentabilidad y sostenibilidad del emprendimiento.
Conocer los riesgo que te lleva iniciar con un nuevo proyecto te hace ser cauteloso en tus acciones, pero pensar en las utilidades del mismo te hace ser impulsivo, y es ahí donde el emprendedor cae en los errores más comunes y lleva su proyecto a riesgos innecesarios; con el fin de que las personas próximas a emprender no cometan ninguna equivocación vamos a presentar los errores más comunes al momento de emprender:
Empezar sin preparación
Cada emprendedor debe tener conocimiento de la actividad que va a realizar, adicional deberá realizar una buena investigación de mercado y contar con un plan de negocio estratégicamente estructurado.
No pensar en la competencia
Los emprendedores se entusiasman tanto que piensan que para su proyecto no existe competencia y que por tal motivo el producto se venderá solo, debemos tener en cuenta que por muy innovadora que sea la idea siempre hay personas alrededor de nosotros pensando casi lo mismo y tratando de posicionarse en el mercado, y quizá algunas para hacerlo se llevarán nuestras ideas y las ejecutarán mucho mejor que nosotros.
Pensar que solo puede hacerlo todo
Por temor a compartir sus conocimientos y las utilidades de su emprendimiento, quieren manejarlo todo, sin embargo contar con apoyo dentro de los procesos y técnicas nos ayudarán a crecer mucho más rápido y de mejor manera, ya que tendremos varias perspectivas para mejorar el producto o servicio.
No considerar los aspectos legales
Generalmente los emprendedores olvidan por completo la estructura legal, por ello organizar la empresa se convierte en el mayor obstáculo, recomendamos que estén conscientes de las leyes vigentes en el país y trabajen con antelación sobre ellas.
No controlar las finanzas
El motor del negocio son sus ventas y por ende la remuneración que obtenemos de ellas, el emprendedor suele emocionarse con sus primeras utilidades y derrocha lo que ha obtenido, sin embargo lo que realmente debería hacer es pagar primero las deudas de financiamiento del negocio, ahorrar dinero por si alguna crisis dentro del país y concentrarse en reinvertir este dinero para obtener mayor rentabilidad.
No brindan un buen servicio al cliente
El emprendedor inexperto se concentra sólo en las primeras ventas del negocio y luego las descuida, sin darse cuenta que son las ventas el motor de su negocio y estas se mantienen con un buen servicio al cliente y dejándole a este un sentido de propiedad para que no sólo regrese sino también te recomiende, “un cliente satisfecho atrae a 2 clientes más, pero un cliente insatisfecho te quita 8”.
No dedicarle el tiempo completo al emprendimiento
La mayoría de personas buscan emprender para lograr la libertad financiera y laboral, sin embargo, si bien es cierto que lo lograrán también se debe tomar en cuenta que no va a ser posible desde el inicio, para empezar debemos trabajar duro y ser persistentes para posicionarnos en el mercado, y una vez que alcancemos ese auge podemos empezar a delegar más tareas y por ende a dedicar más tiempo a lo personal, pero recuerda estos no se logra antes de nada.
Todo tiene un ciclo, debemos seguirlo y respetarlo exigentemente para lograr completarlo, un emprendimiento no es algo que se logrará en un “abrir y cerrar de ojos”, para ello debemos centrarnos en lo que vamos a hacer y realizarlo de la mejor manera posible, así mismo concentrarnos en lo que vamos a ofrecer en el mercado.